:: Yo no creo en Lennon ::
Parental Advisory: Este escrito está dedicado a mis entrañas. No siga leyendo si no le interesan mis entrañas.
Sentado...
Una muralla blanca…
Una puerta café…
Las mismas cortinas de hace años…
Un tal Lennon suena por primera vez en este pequeño aparato que
me compré hace poco.
La misma sensación de embriaguez que pretende engañarme.
La mesa tan desordenada como siempre.
El sol entrando a pedazos por una ventana que apunta hacia el mar
del puerto lejano tan putrefacto.
Vasos sucios.
Una mezcla entre lo abúlico y lo grotesco.
Mis pensamientos me hablan del infierno rojo,
del infierno blanco,
del infierno terrestre…
Yo le hablo del infierno de todos los días.
El pensamiento calla.
Entonces el mundo pesa caleta en mis ojos.
Las lágrimas huyen como las ratas,
en este barco que está por hundirse.
Entonces ese tal Lennon me habla del amor.
Yo le hablo de pensión alimenticia,
de asuntos judiciales,
¡¡¡ C’mon !!!
¡¡¡ El amor no es real !!!
El amor no es ni siquiera un sentimiento.
El amor no se toca.
Yo no pido el puto amor,
porque al final terminas poseído
como un ángel.
Yo no soy el amor,
no estoy ni ahí con saberme amado.
La libertad es un plato que se come amargo,
en estos días donde la emancipación
es otro artilugio más,
para seguir gastando.
El mundo no necesita amor.
El mundo necesita la escoria
que llevamos en nuestros corazones,
porque así sobrevive
la huella
horizontal
de la vida.
Las luces no paran de brillar,
en ausencia de la verdadera luz.
Y como simples zapallos,
esperamos que nos rajen,
sin emitir sonido alguno.
Entonces la muralla blanca cae de golpe,
otra vez…
la misma realidad sensible,
que se presenta como una frontera infranqueable.
Entonces, el pensamiento me habla de viajes
de huídas, de la maldita creación que expele de mis axilas
subliminales.
Yo le hablo de las mismas calles, de la globalización,
de las mismas miserias en todas partes
Huir del barro para convertirse en hoja marchita,
que todo lo observa
Huir!!!
para terminar en una sala de hospital
infartado, cancereado, agujereado, en coma.
Siempre fuimos el recuerdo
Lo que pasa es que era necesario transformarse
en el recuerdo.
lo demás son meros instrumento para la fundición del material.
Somos aquel pedazo de mierda con ojos,
en el cual se apoya el mundo para girar.
Siempre se trató de una claudicación,
Lo que pasa es que hay alguno que se rinden antes que otros.
Ya lo dije antes:
lo que más faltan son las ganas.
En este aparato, Lennon sigue con sus blasfemias.
Yo tampoco creo en todo eso
ni tampoco en mi cerebro, ni en mis huesos, ni en mi corazón…
nunca los he visto.
c'mon Lennon, you're right...the dream is over
let's drinks this capel ice, and Forget all this crap...
Where love is gone forever.
Sentado...
Una muralla blanca…
Una puerta café…
Las mismas cortinas de hace años…
Un tal Lennon suena por primera vez en este pequeño aparato que
me compré hace poco.
La misma sensación de embriaguez que pretende engañarme.
La mesa tan desordenada como siempre.
El sol entrando a pedazos por una ventana que apunta hacia el mar
del puerto lejano tan putrefacto.
Vasos sucios.
Una mezcla entre lo abúlico y lo grotesco.
Mis pensamientos me hablan del infierno rojo,
del infierno blanco,
del infierno terrestre…
Yo le hablo del infierno de todos los días.
El pensamiento calla.
Entonces el mundo pesa caleta en mis ojos.
Las lágrimas huyen como las ratas,
en este barco que está por hundirse.
Entonces ese tal Lennon me habla del amor.
Yo le hablo de pensión alimenticia,
de asuntos judiciales,
¡¡¡ C’mon !!!
¡¡¡ El amor no es real !!!
El amor no es ni siquiera un sentimiento.
El amor no se toca.
Yo no pido el puto amor,
porque al final terminas poseído
como un ángel.
Yo no soy el amor,
no estoy ni ahí con saberme amado.
La libertad es un plato que se come amargo,
en estos días donde la emancipación
es otro artilugio más,
para seguir gastando.
El mundo no necesita amor.
El mundo necesita la escoria
que llevamos en nuestros corazones,
porque así sobrevive
la huella
horizontal
de la vida.
Las luces no paran de brillar,
en ausencia de la verdadera luz.
Y como simples zapallos,
esperamos que nos rajen,
sin emitir sonido alguno.
Entonces la muralla blanca cae de golpe,
otra vez…
la misma realidad sensible,
que se presenta como una frontera infranqueable.
Entonces, el pensamiento me habla de viajes
de huídas, de la maldita creación que expele de mis axilas
subliminales.
Yo le hablo de las mismas calles, de la globalización,
de las mismas miserias en todas partes
Huir del barro para convertirse en hoja marchita,
que todo lo observa
Huir!!!
para terminar en una sala de hospital
infartado, cancereado, agujereado, en coma.
Siempre fuimos el recuerdo
Lo que pasa es que era necesario transformarse
en el recuerdo.
lo demás son meros instrumento para la fundición del material.
Somos aquel pedazo de mierda con ojos,
en el cual se apoya el mundo para girar.
Siempre se trató de una claudicación,
Lo que pasa es que hay alguno que se rinden antes que otros.
Ya lo dije antes:
lo que más faltan son las ganas.
En este aparato, Lennon sigue con sus blasfemias.
Yo tampoco creo en todo eso
ni tampoco en mi cerebro, ni en mis huesos, ni en mi corazón…
nunca los he visto.
c'mon Lennon, you're right...the dream is over
let's drinks this capel ice, and Forget all this crap...
Where love is gone forever.
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