El destino..

El destino



es el equivalente al propósito de un programa informático (Véase Matrix). Todos tenemos un propósito, una tarea que cumplir como seres complejos. El destino vendrían siendo las casualidades que de alguna manera van dibujando el camino. La estadística pretende de manera específica aprender a dibujar ese destino, pero todavía no se logra a cabalidad.

Yo creo en el destino, y es obvio que está predestinado, pero de manera casual no espiritual.

Es como ver mas allá de lo evidente, es como sentarse a hilvanar los sucesos que acontecen a diario y sus causas. Los gringos utilizan muy bien esta técnica pues comprometen recursos y generan situaciones favorables a su causa a través de intervencionismo de bajo perfil en las políticas de un país, espionaje, investigación y manipulación de influencias. ESto influye indiscutiblemente en los destinos de los mas pequeños,.. osea nosotros... aquellos que sólo reflejamos una cifra en este inmenso mundo.

El destino (o propósito) debe ayudarnos a encontrar mas tarde que temprano la sensación indispensable para pasar al siguiente paso: plenitud. Un inmortal no puede ser pleno y un mortal sólo lo es cuando alcanza sus objetivos. Es contradictorio el efecto vida eterna frente al ideal de la esperanza. Es confuso y notable el hecho de que siempre buscamos la inmortalidad para darnos ams tiempo de buscar lo que anhelamos, sin embargo, la plenitud se alcanza en el momento histórico que nos tocó aparecer. es claro que la muerte es un reseteo de cara a nuestra siguiente aventura para enriquecer aún mas el código fuente y llegar la sistema operativo supremo, es decir, ser parte del todo.

Hay algunos que por alguna razón no les interesas ser parte del todo y prefieren negar la existencia de la fuente. Es una postura válida, siempre y cuando por si mismos puedan llegar a la plenitud absoluta. Un camino largo, utópico e incierto.