:: Rebote ::
¿Es imposible ahuyentar la costumbre de pasar desapercibido? Camina como alguien que no tiene rostro ni mucha indulgencia. Pasa con mucha pena, satisfecho de la experiencia diaria sin que a nadie le importe, pero en la gloria. Todos están ahí, a tu alrededor; son seres sin rostros, sin forma muchas veces, todos los días rebotan en tu mirada, sin que te importe demasiado. Hay un total interés en ir y volver, en ir y volver, en rebotar como una pelota que sube y baja del cielo hacía el infierno, y vuelve a rebotar. Vida que rebota como un delicioso veneno que oxida la vital inocencia. La mayoría del tiempo no emite palabras, conversa consigo mismo, juzgando el prejuicio ajeno. Cree que avanza mientras sigue rebotando, sigue elaborando jornadas que no salvan a nadie del destierro de su mirada, cuando trata de volver al inicio, cuando trata de resetearlo todo y poder dormir en paz. Hay veces que las imágenes de la realidad rebotan en el vidrio del v