:: Pos-moderno ::
Abrir la manos, planeando un mediodía (con los brazos abiertos) que tiene mucho que ver con suspenderse, cerrando los ojos, para dar forma al misterio Observar el horizonte de las calles, atestadas de inocencia crepuscular. El vaivén de mi cabeza se corrompe, no procesa, siente el rechazo de la indiferencia silenciosa. Quizás sea sólo un asunto de percepción maltratada Quizás no sea mas que un pequeño cascarón del capullo, que todos confundimos con el todo. El vacío sigue desperdigado en los vectores, de los cuales cuelgan multicolores defectos, millones de motivos y un sentido vertical del tiempo que, poco a poco, desaparece. Entonces uno tiende a cambiar las ideas, a estafarse con nuevas construcciones de poder, volviendo a la contemplación serena de la metástasis revolucionaria, justificando el opus en discordia que aparece, al frente, en ese espejo que pocas veces utilizamos para apuntarnos con