
¿Y quienes somos para citar la palabra como el escupitajo sagrado de los dioses, para enjaular los pájaros divinos que quisieron volar, a expensas de la negación silvestre de la esperanza?.
5.14.2010
5.06.2010
:: Polvo de Ciudad Gris::

Es la sacudida del polvo
en esta temprana ciudad.
Un lento y efímero abanico de ilusiones malgastadas,
se anudan en el cuello,
magullando la retahíla de hojas muertas,
que van cayendo,
presentando un espectáculo funesto,
una imagen reiterada.
Las marionetas huyen al centro de la ciudad.
El nocturno plañido de las nubes a nadie le importa.
En el cráter de mi nariz ,
llueven meteóricos lamentos negros.
Una sierpe primigenia
surge del rincón más profundo
de mi silueta cansada,
de tanto estrellarse,
con la misma pared de siempre.
Es la misma fotografía
añeja y reincidente,
de todos los días.
Es la misma utopía,
que ronda los pensamientos.
Falacias sembradas en el momento exacto
de las renuncias al tiempo,
que todo lo consuela.
Las botas en el piso,
los pantalones gastados,
una chaqueta a medio cerrar,
nieve en la cabeza,
humedad en las calles de la ciudad,
cifras caminando por montones,
cada una
(pensándose)
escrita con letras de oro,
y no son más que meras evocaciones
propias de la casualidad,
que borra lo pactado,
con el codo de la muerte.
Ventanales paisajes donde depositar los anhelos
Soberanos colores que producen momentos
en serie.
El cielo abre su hocico sin fin,
para tragarse el día,
a pedazos.
Y uno aquí...
El punto desteñido,
en una jornada de esas que pasarán
a los recuerdos.
Si tan solo la mediocridad se limpiara
con una lija de plásticas caricias.
Si tan solo la elucubraciones metafísicas,
le robaran algunos miseros segundos,
a la estentórea declaración,
de ser aquellos que luchamos,
en esta puta guerra espiritual,
que a nadie importa en estos días.
¿Es que acaso soy el único
que saborea al mundo,
procurando que todos se vayan enterando?
Es la sacudida del polvo
en esta temprana ciudad.
Es el polvo que no me abandona,
que sigue pegado a mis huesos imaginarios.
Ese polvo que se divierte,
que me sigue cada día...
cada noche.
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